lunes, 16 de septiembre de 2013

HECTOR LAVOE

Héctor LavoeDe Wikipedia, la enciclopedia libre Saltar a: navegación, búsqueda Héctor Lavoe Datos generales Nombre real Héctor Juan Pérez Martínez Nacimiento 30 de septiembre de 1946 Origen Ponce, Puerto Rico Muerte 29 de junio de 1993 (46 años), Nueva York, Estados Unidos Ocupación Cantante Información artística Tipo de voz Tenor Otros nombres El Cantante de los Cantantes, El hombre que respiraba debajo del agua, El hombre que cuando abre la boca lo que sale es gasolina [1] [2] Género(s) Salsa, Bolero Instrumento(s) Voz, Maracas Período de actividad 1965-1991 Discográfica(s) Fania Records[3] Artistas relacionados Willie Colón, Fania All Stars, Joey Pastrana, Celia Cruz, Johnny Pacheco, Rubén Blades, Roberto Faz, Tito Gómez, Cheo Feliciano, Benny Moré Héctor Juan Pérez Martínez más conocido como Héctor Lavoe (Ponce, 30 de septiembre de 1946 - Nueva York, 29 de junio de 1993)[4] fue un cantante de salsa puertorriqueño, cuya personalidad, estilo y cualidades de su voz lo llevaron a una exitosa carrera artística en el ámbito musical de la música latina y salsera durante los años setenta y ochenta. La limpieza y brillo de su voz aunada a una dicción impecable y la cualidad para cantar fraseos extensos y rápidos con total naturalidad, lo hicieron uno de los cantantes favoritos del público latino. Índice [ocultar] 1 Infancia e inicios 2 Etapa como cantante de la orquesta de Willie Colón (1967-1974) 3 Etapa como cantante solista 4 Últimos años y muerte 5 Características de su voz 6 Reconocimientos 7 Influencia 8 Discografía 8.1 Con la orquesta New Yorker 8.2 Con la orquesta de Willie Colón 8.3 Con su orquesta 9 Con Fania All Stars 10 Con Tito Puente 11 Referencias 12 Enlaces externos Infancia e inicios[editar · editar fuente]Héctor Juan Pérez Martínez (uno de ocho hijos), nació en el seno de una familia humilde en Ponce (Puerto Rico). Era hijo de Francisca Martínez (Panchita) y de Luis Pérez (Lucho). A los tres años de edad perdió a su madre, lo cual sería el primero de muchos golpes en la vida del cantante. Su padre, quien tocaba la guitarra con tríos y orquestas locales dio instrucción musical a su hijo, y lo matriculó en la Escuela de música Héctor Juan Morel Campos; tenía el sueño de ver a Héctor convertido en un gran saxofonista. Aunque Lavoe aprendió los fundamentos de música, pronto perdió interés en el instrumento. Sentía que lo suyo era cantar. Cuando era joven, Héctor pasó gran parte de su tiempo escuchando música jíbara y popular. Sus cantantes favoritos eran Chuito El de Bayamón, Odilio González y Daniel Santos, cuyas voces y estilos imitó. Otros cantantes que influyeron enormemente en Héctor fueron: Cheo Feliciano, Ismael Rivera, y la clara voz de Ismael Quintana. A la edad de 14 años, era el cantante en una banda en Puerto Rico. Le pagaban dieciocho dólares por noche, lo que en 1960 era un buen sueldo para un joven.[5] Héctor soñaba con cantar en Nueva York y hacer fama y fortuna. Su padre estaba totalmente en contra de la idea, porque el hermano mayor de Héctor había emigrado hacia allá y murió en un accidente. Contra los deseos de su padre, Héctor llegó a Nueva York el 3 de mayo de 1963 a la edad de 17 años. Se mudó con su hermana mayor Priscilla. Su primera impresión de la ciudad, la cual consideraba como un lugar espléndido en la Tierra, fue decepcionante, al ver en la parte latina los edificios descuidados y las calles llenas de basura. Sus primeros trabajos después de su llegada fueron como pintor, maletero, mensajero y conserje. Su amigo de la infancia, Roberto García, que vivía en Nueva York, lo invitó a asistir a un ensayo de un sexteto que se estaba formando. El vocalista cantaba «Tus ojos» y no estaba haciendo un buen trabajo, así que Héctor le sugirió que lo intentara de otra manera. Héctor cantó la melodía para que el cantante pudiera hacer los ajustes necesarios y la banda lo asimiló inmediatamente como su cantante principal.[5] Más tarde se conectó con Russell Cohen, director de la New Yorker Band con la cual en 1965 grabó su primer sencillo de 45 rpm: «Está de bala». Comenzó a tocar con bandas como la de Francisco Bastar Kako y sus All Stars, a través del cual conoció a su padrino artístico Johnny Pacheco, que inmediatamente reconoció su talento artístico y, poco después se lo recomienda a Willie Colón para la grabación de su primer disco El malo (1967).[5] Etapa como cantante de la orquesta de Willie Colón (1967-1974)[editar · editar fuente]Entre 1967 y 1973, Lavoe se convirtió en el cantante de la Orquesta de Willie Colón, con quien grabó un total de nueve discos.[cita requerida] Willie Colón era un músico joven que estaba tocando jazz latino y boogaloo. En 1967 tenía listo su primer álbum para Fania Records y a Johnny Pacheco no le gustó el cantante de esa orquesta y propuso a Héctor Lavoe para que lo sustituyera. Para aquel entonces Colón era considerado un joven músico de propuestas interesantes pero con mal sonido. Pacheco ya estaba al tanto de la voz de Héctor, su enunciación impecable y sus habilidades estilísticas. En un principio Lavoe no estaba interesado en grabar con Colón, ya que consideraba que esa agrupación tenía muchas fallas y alimentaba la esperanza de ser llamado por alguna de las orquestas más importantes del momento. Considerando que su pasantía por esa orquesta sería corta, se negó a participar en las portadas de los dos primeros álbumes.[6] En el verano de 1967 salió al mercado su primer trabajo discográfico llamado El malo y en 1968 se edita The Hustler el segundo álbum de Lavoe. Para aquel entonces, Lavoe es el vínculo de la orquesta de Colón con lo caribeño y poseía una voz melodiosa de tenor pero áspera y con timbre nasal. Lavoe no cantaba en ingles por lo que Willie Colón decidió aprovechar el potencial que brindaba el cantante para decantarse definitivamente hacia la música latina afroantillana.[7] Al año siguiente (1968) se edita Guisando, el primer disco donde Lavoe comparte créditos con Colón y aparece en la portada. Guisando es el primer disco de salsa de la pareja donde los ritmos se acercan a la guaracha, el son, la guajira y el guaguancó con fusiones atrevidas e ingeniosas proponiendo un estilo agresivo e irreverente de hacer música. Destacan los temas «Guisando», «No me den candela» y «Te están buscando», con letras que abordan con humor historias de carteristas o ladrones que son perseguidos por la policía y temas universales como la envidia, la maldad, el chisme y la santería donde se siente los anhelos de felicidad de la diáspora boricua discriminada en la ciudad de New York.[6] Durante 1968 Lavoe inició una relación sentimental con Carmen Castro. Castro quedó embarazada, pero se negó a casarse con él porque lo consideraba un mujeriego. El primer hijo de Lavoe, José Alberto Pérez nació el 30 de octubre de 1968. Cuando José fue bautizado, Héctor recibió una llamada informándole de que Nilda Puchi Román (con quien también tuvo una relación) estaba embarazada. El segundo hijo de Héctor, Héctor Jr. nació el 25 de septiembre de 1969. Después de esto, la pareja se casó, y tras una petición de su esposa, Lavoe hubo de mantenerse alejado de su primer hijo y la madre de este.[5] La hegemonía de Willie Colón y Héctor Lavoe se consolidó a fines de 1969 con el lanzamiento de Cosa Nuestra cuyo título hace referencia a la expresión italiana «Cosa nostra» y sus implicaciones en el mundo de la mafia. La pareja consolida con la portada del disco y las letras de las canciones su imagen de «chicos malos», a pesar de que nunca incitaron a la juventud a cometer delitos; simplemente realizaban pequeñas crónicas de la vida en los barrios y comunidades latinas de Nueva York. Los temas más destacados fueron: «Che Che Colé», «Te conozco», «Tú no puedes conmigo», «Sangrigorda» y «Ausencia» que fue uno de los boleros más radiados de la época. El éxito de este disco se afincó en un repertorio de carácter urbano y popular y en las vocalizaciones afinadas, sabrosas y sentimentales de Héctor Lavoe. Héctor Lavoe buscaba darle a sus canciones el toque propio de su país natal, Puerto Rico, y lograr que se identificara con esta nueva música que estaba tocando, que ya era salsa, pero todavía no había sido bautizada como tal. Colón estaba ensayando una fusión entre múltiples ritmos afro-antillanos, junto con el jazz estadounidense en los acordes de los trombones. Todo esto le daba un toque bastante agresivo a sus composiciones, lo cual se complementaba perfectamente con el estilo de cantar de Lavoe, que era callejero y desafiante. Para 1970 esta amalgama entre música urbana, salsa y folklore cobra relevancia en el disco Asalto navideño, que evoca el sentir religioso y patriótico de las fiestas navideñas, combinado con el efecto de la parranda de ir de casa en casa con cánticos.[8] En este álbum el maestro Yomo Toro hace alardes de su virtuosismo dando un aire puertorriqueño a gran parte de los temas. La canción más popular de este disco fue «La murga», con su contagioso ritmo y la potente y afinada voz de Héctor, que comienza hacer gala de soneos e improvisaciones inolvidables cuando en el solo de trombón dice: «Guapea Willie Colón… El diablo». El éxito de estos álbumes transformó significativamente las vidas tanto de Colón y de Lavoe. La banda de Colón ofreció un crudo y agresivo sonido de trombones que fue bien recibido por los fanáticos de la salsa y Lavoe complementa el estilo con su voz articulada, talento para la improvisación y sentido del humor. Héctor recibió un reconocimiento inmediato, trabajo estable, y el dinero suficiente para proporcionarse un cómodo estilo de vida. De acuerdo a Lavoe, todo pasó tan rápido que no sabía cómo lidiar con el éxito repentino. La carrera artística de Héctor Lavoe continuó con la publicación de su sexto trabajo con Colón La gran fuga 1971, de donde se desprendió el inolvidable tema «Panameña» y donde Lavoe, en el «puente» de la canción, que se detiene por un instante, improvisa: «La salsa de Puerto Rico… El aguinaldo» y los trombones junto al sinuoso piano del profesor Joe Torres crean una explosión de sabor.[9] Su éxito era tal que constantemente eran contratados por toda Latinoamérica para presentarse ante multitudes. Los trombones se volvieron el instrumento más típico de la salsa, algo que funcionó muy bien para este binomio salsero. Sin embargo, Lavoe comenzó a consumir drogas, a llegar tarde a los conciertos y a llevar una vida de excesos que comenzó a hacer mella en su indiscutible talento. Desde su época con Willie Colón se hizo adicto a las drogas y comenzó a incumplir sus compromisos artísticos. Tuvo que someterse a varias rehabilitaciones.[cita requerida] Luego de seis producciones para el sello Fania y con una propuesta musical en plena evolución, Lavoe junto a Colón lanzó al mercado El juicio (1972). El álbum cosechó éxitos inmediatos tales como: «Piraña» del Tite Curet Alonso, donde Lavoe despliega todo su potencial vocal y estilo lleno de frases populares con doble sentido, que muestran el carácter pendenciero que caracterizó al cantante en varios pasajes de su vida. Otros temas destacados fueron «Soñando despierto» y el bolero «Seguiré sin ti» que Lavoe canta con una forma vocal retardada con un estilo entre apasionado y sentimental. En el número de apertura Ah, Ah/O-No la voz de Héctor es evasiva y traviesa demostrando su juego vocal de palabras y astucia rítmica.[10] Lo mato (1973) fue el trabajo culminante de la trayectoria artística de la pareja cuando ambos se encontraban en la plenitud de sus facultades creativas. Willie Colón compone algunas de las mejores canciones de su carrera. Temas como «El día de suerte», «Todo tiene su final» y «Calle luna calle sol», son referencia obligada en el repertorio del cancionero musical salsero, engalanadas por la voz de Héctor llena de alma y poesía, demostrando su impecable fraseo y contagioso sentido del humor. Este álbum cuenta la historia de dos jóvenes artistas que estaban más que preparados para conquistar el mundo musical.[11] En 1974 Lavoe participa en el primer disco solista de Willie Colón The good, the bad, the ugly, interpretando tres canciones. Este último trabajo marcó la separación de la pareja que se materializa en 1974. En un principio Lavoe se sintió traicionado y no comprendió las razones, en una época en que estaban en el cenit de sus carreras. Lavoe dependía mucho de Colón y la retirada de su amigo le causó inseguridades y una sensación de abandono. Sin embargo años más tarde, se dio cuenta que separar sus carreras había resultado un acierto y el sello Fania se benefició de los resultados posteriores ya que sus futuras producciones resultaron muy exitosas. A pesar de esta separación, Lavoe siguió contando con la colaboración de Willie Colón en la producción de varios de sus álbumes como solista. Etapa como cantante solista[editar · editar fuente]A mediados de los años setenta el sello Fania decidió dar apoyo a sus cantantes de mayor éxito dotándolos de orquestas propias. Para el lanzamiento de Héctor Lavoe se preparó una banda donde a la línea de trombones se agregaron dos trompetas. La sección rítmica era idéntica a la empleada con Willie Colón y en el piano estuvo Mark Dimond, un viejo conocido que los había acompañado en sus primeros álbumes. Los arreglos estuvieron a cargo de José Febles y el propio Colón quien continuaba en los coros junto a Rubén Blades. Con esta agrupación Lavoe inició su carrera como solista, donde lanzando el álbum titulado La Voz (1975), en cuya portada aparece una foto del cantante que es clásica. Este disco fue un éxito total y sus ventas alcanzaron disco de oro en poco tiempo. Las canciones destacadas fueron: «Rompe, Saragüey», un clásico de los años cincuenta totalmente modernizado, donde Dimond ejecuta un elegante e ingenioso solo de piano de dos minutos y medio; «El todopoderoso», escrita por el venezolano Pedro María Perucho Torcat, y el himno escrito por Johnny Pacheco «Mi gente», que fue un tema insignia en las presentaciones en vivo que Lavoe realizaba con la Fania All Stars. En este álbum Lavoe demuestra su versatilidad como cantante interpretando tres piezas que son todo un clásico del bolero de los años 70: «Tus ojos», «Emborráchame de amor» y «Un amor de la calle», mostrando una elevada sensibilidad y una facilidad innata para interpretar este género musical.[12] Al año siguiente Lavoe lanzó su segundo álbum como solista llamado De ti depende (1976), producido por Willie Colón y arreglos de Luis Perico Ortiz, Louie Ramírez y José Febles. En este álbum Lavoe vuelve a apostar por los boleros como parte importante del repertorio, al punto que el álbum toma el nombre de uno de ellos y además Lavoe interpreta el tema «Consejo de oro», un viejo tango modernizado, y «Tanto como ayer». Pero los temas que sobresalen por su carácter salsero son: «Vamos a reír un poco», donde muestra sus habilidades como sonero, y «Hacha y machete», una especie de autohomenaje donde la dupla Lavoe-Colón entona: «De frente vamos a demostrar/que lo nuestro/no fue un golpe de suerte. Somos hacha y machete/y esa es la verdad». Mención especial para el tema de Tite Curet Alonso, «Periódico de ayer», un clásico que se convirtió en un éxito radial en Latinoamérica y la cuenca del Caribe.[13] Hubieron de pasar dos años para que Héctor Lavoe completara su trilogía luego de su lanzamiento como solista. Los dos álbumes anteriores habían sido éxitos instantáneos y había que apelar a algo importante si se pretendía continuar con la línea ascendente del cantante. Willie Colón contactó con Rubén Blades quien se encontraba trabajando en una composición para él, sin embargo aceptó cederla a Héctor y, «El cantante» se convirtió en el tema que marcó pauta en el tercer disco de Lavoe titulado: Comedia (1978).[14] En El cantante se combinan unos arreglos de cuerdas, arpa y piano que colorean decorativamente el lamento de Lavoe semejando al artista que debe aparentar alegría en tanto lo embarga un gran dolor. Lavoe representa en forma magistral ese personaje que describe la vida entre dulce y agria y donde se establece la ironía del artista como figura trágica, excelentemente ilustrada en la carátula del disco donde viste un traje y la apariencia de Charles Chaplin.[14] En este álbum también tuvieron gran repercusión los temas: «Bandolera», una equilibrada mezcla entre la experiencia vocal de Lavoe y un arreglo orquestal con solo de piano que personifica la vieja escuela de la salsa, y «Sóngoro cosongo», un son montuno que pinta una danza tribal en la barriada, con letra de un poema del cubano de Nicolás Guillén. Lavoe continúa introduciendo boleros que muestran la profundidad y emocionalidad de su voz, se trata de los temas: «Porque te conocí» y «Comedia».[14] En esta época, las presentaciones en vivo de Lavoe no obtuvieron los resultados esperados no solo por sus problemas de drogas que le impedían cumplir con responsabilidad las fechas y horas previstas, sino porque los números bailables que por lo general eran canciones que sobrepasaban los seis minutos, tenían un carácter extenuante. Todo esto causó cierto desgaste y la sobreexposición del artista. Lavoe cayó en un cuadro de profunda depresión y desapareció de sus actuaciones en vivo por un período prolongado, siendo sometido a periodos de rehabilitación. En 1979 Lavoe edita el álbum: Recordando a Felipe Pirela, compuesto por canciones que hicieron famoso al cantante venezolano. Héctor siempre admiró a este cantante que paradójicamente tuvo un destino trágico al morir en Puerto Rico siendo bastante joven. Para esa época la disquera Fania comenzaba a sufrir los embates de la crisis de la salsa y en lugar de otorgar al cantante temas inéditos, se deslizaron por un camino seguro, haciendo versiones de boleros ya populares. El disco logró buena aceptación y ventas, sin embargo a nivel artístico constituyó un punto de inflexión en la carrera ascendente del cantante cuyo fuerte siempre fue la improvisación en los “soneos” y su forma de encarar la salsa bailable. Carlos Francetti, Jorge Calandrelli y Luis Cruz, tuvieron a su cargo los arreglos musicales y entre los temas escogidos pueden mencionarse: «Vieja carta», «El retrato de mamá». «Pobre del pobre» y «Sombras nada más». Para quienes no conocieron estos boleros en la voz de Felipe Pirela este disco pudo haber sido un gran descubrimiento.[15] A fin de año se edita el tercer disco navideño de Héctor: Feliz Navidad 1979, que por su carácter se graba solo para ser vendido en esas fechas. A pesar de algunas canciones jocosas como: «Joven contra viejo» (grabada con Daniel Santos), «Montserrat», «Una pena en Navidad» y «Dame un chance», el disco ―cuya portada fue catalogada de ridícula por All Music― no tuvo mayor trascendencia.[16] Héctor Lavoe regresa a la salsa bailable con su sexto álbum de estudio como solista, El sabio (1980), con canciones que sin ser éxitos rotundos tuvieron cierta popularidad entre ellas: «El sabio», «Noche de farra» y el bolero «Plazos traicioneros», que había sido grabado por Celia Cruz y Willie Colón en 1977. Además participó en los álbumes grabados por la Fania All Stars Commitment (1980), con el tema «Ublabadú», que resultó un éxito instantáneo en las emisoras latinas de radio, y el tema «Semilla del amor», del álbum Latin Connection (1981), cuyo arreglo sinfónico estuvo a cargo del colombiano Francisco Zumaque. En su séptimo álbum como solista, Qué sentimiento (1981), Willie Colón se separa de la producción del disco, y es el propio cantante quien se encarga de ello. José Febles y Louie Ramírez actuaron como codirectores musicales.[17] El repertorio escogido, los arreglos y hasta la carátula del álbum marcan el regreso del cantante a los niveles artísticos de sus tres primeros trabajos como solista. Los temas: «Soy vagabundo», «No hay quien te aguante» y «Amor soñado», parecieron haber estado hechos a la medida del artista. La Asociación de Cronistas del Espectáculo (ACE) de Nueva York entrega a Lavoe un reconocimiento a la excelencia por este disco.[18] Para 1983, cuando se lanza Vigilante, la carrera de Lavoe estaba en un punto incierto debido a su comportamiento errático y su desesperante relación con las drogas. Fania decide darle un empuje al juntarlo nuevamente con Willie Colón quien canta en solitario uno de los cuatro temas del disco y deliberadamente toma un rol secundario, dejando que sea su venerado compadre el que brille. La música del álbum, aderezada por una portada que muestra una pistola humeante con tres casquillos de bala, apela a la nostalgia del dúo, que encabezó la Explosión Salsera del primer lustro de los 70, pero con un sonido más actualizado.[19] El álbum arranca con el éxito «Triste y vacía», con Héctor en plenitud de formas y un coro ampliado narrando la historia de una mujer marcada por la traición y la mala suerte. «Juanito Alimaña», de Tite Curet Alonso, fue el sencillo promocional que rápidamente escaló los primeros lugares en la radiodifusión. Este tema se convirtió en una especie de himno que retrata la vida de un matón de barrio que tiene impunidad, por sus relaciones con la policía y por eso los vecinos no pueden delatarlo cuando comete sus fechorías. Otro de los temas considerablemente largos es: «Pasé la noche fumando» donde Lavoe y Colón conjugan sus voces en una especie de lamento que personifica un hombre que pasa la noche en un bar bebiendo y fumando para tratar de olvidar la pérdida del amor de su vida. El álbum Vigilante tiene su propia aura y brillo particular. Si bien no funcionó como la banda sonora que estaba destinada a ser, el álbum cumplió su misión de poner a Héctor Lavoe de vuelta en carrera con dos poderosos éxitos.[19] En 1984, Johnny Pacheco compuso para Lavoe la canción «El rey de la puntualidad», que se incluyó en el álbum Lo que pide la gente (de Fania All Stars). Era una descripción cómica de la incapacidad de Héctor por llegar a tiempo a sus presentaciones.[18] Grabado en 1985 en medio de la debacle de Fania Records Jerry Masucci produce uno de los álbumes menos interesantes de la discografía de Héctor Lavoe: Reventó. Lavoe no estaba contento con su carrera y su inestabilidad emocional encendió un comportamiento impredecible. A pesar de que el disco se intentó promocionar por diversos medios ninguna canción estuvo a la altura de sus grandes éxitos anteriores y pasó desapercibido a pesar de un solo de piano de Richie Ray en el tema «Cáncer» y del tema «Fama», escrito por Lavoe, que relata la triste crónica de una fatalidad anunciada y gestada pocos años después: «No tengo amigos/y si un amor fácil lo consigo/así de fácil lo he de perder/Mi madre dijo: no creas ser un gran tenorio/pararás en un sanatorio y allí la fama habrás de perder».[20] A fines de 1986 Héctor regresó a las ondas radiales pegando fuerte con la composición «Plato de segunda mesa», de Tite Curet Alonso, incluida en su disco Strikes back (1987), producido por Willie Colón. Strikes back, coincide con la debacle de la salsa tradicional pero fue reconocido con una nominación al Grammy. Con el lanzamiento de Strikes back, distribuido durante el periodo de mayor efervescencia de la «salsa cosmética», Lavoe siguió fiel a la tradición de la rítmica y la narrativa salsera. En aquellos días Eddie Santiago y Frankie Ruiz se coronaban como los nuevos reyes de la salsa sensual y erótica con sus éxitos Tú Me Quemas y Desnúdate Mujer. De toda la discografía de Héctor Lavoe, Strikes back no es su mejor grabación; pero en cada interpretación entregó su alma.[21] Ese mismo año participa en el álbum de Fania All Stars Viva la charanga (1986) con el tema «Isla del encanto».[18] En 1993 Fania publica un álbum llamado Héctor Lavoe & Van Lester. The master and the protegee. Esta grabación al principio fue producida por Willie Colón y yo, en marzo de 1986. En aquel tiempo se grabaron 16 canciones, de las cuales 8 fueron presentadas en el álbum “Héctor Lavoe Strikes back” (1987). Lamentablemente, la salud de Héctor le fallaba muy a menudo y le impedía asistir a las sesiones de grabación, y tal como resultó, él nunca pudo completar este álbum. Ya que éste era el último trabajo en el cual Héctor, Willie y yo colaboramos juntos, estuve muy decepcionado de no haberlo completado. Sin embargo, un día para mi asombro, oí una canción en la radio que sonaba exactamente como Héctor, pero yo estaba bastante seguro que nosotros en Fania nunca habíamos grabado tal canción. Después de un poco de investigación, averigüé que el cantante que yo había oído no era otro que Van Lester. Inmediatamente llamé a Ralph Mercado y convinimos que Van Lester completaría la voz que faltaba. Yo espero que ustedes estén tan contentos como yo, con el trabajo de Lester completando el final de esta grabación, y que lamentablemente fue la última para Héctor Lavoe. Me gustaría agregar que fue una maravillosa experiencia trabajar con Javier Vázquez, quien supervisó la grabación de la voz de Lester y completó esta grabación. Jerry Masucci en la contraportada del álbum Héctor Lavoe & Van Lester. The master and the protegee[22] Últimos años y muerte[editar · editar fuente]A fines de los años ochenta los problemas de Héctor Lavoe comenzaron a agravarse cuando en 1987 su apartamento en Queens intento quitarse la vida, a saltar por la ventana de su cuarto, el cual estaba en un noveno piso. Esta caída le causó múltiples fractura y a su vez serios problemas de salud . Después le llegó la terrible noticia del asesinato de su suegra. Esto hizo que no volviera a cantar la canción «Soñando despierto», en donde Lavoe se burlaba sanamente de ella. Meses después, aun estando enyesado, se presentó en Bayamón en Puerto Rico, para el Día Nacional de la Salsa, donde gestionaron para que su padre lo viera, ya que nunca había tenido la oportunidad de ver a su hijo en un concierto. Fue una presentación muy emotiva por dicho aspecto, pero lamentablemente el padre de Héctor murió una semana después del concierto. Todos estos sucesos estaban generando un estado depresivo en el diario vivir de Lavoe, pero la tragedia que le terminaría de arruinar la existencia sería para el día 7 de mayo de 1987 al enterarse que su hijo menor, Tito había muerto a causa de un disparo que le dio un amigo accidentalmente mientras limpiaba su revólver. Todo esto causó que Lavoe volviera a recaer fuertemente en el uso excesivo de las drogas, y aquel intento de dejarlas se frustraría para siempre. Pero aún le faltaba por experimentar una tragedia más en su vida al enterarse a comienzos del año de 1988 que padecía de sida.[18] Los conciertos del llamado Cantante de los Cantantes siempre rebosaron de gente y fanáticos. Sin embargo, en junio de 1988, en el concierto que significaría un nuevo impulso a su carrera (la cual estaba deteriorándose por las tragedias) tuvo problemas con el pago a los organizadores del evento; puesto que coincidía con otras festividades las cuales ofrecían presentaciones de manera gratuita, lo cual causó que muy poca gente asistiera a la presentación de Héctor. Sin embargo, Lavoe se ofreció a cantarle a aquella escasa cantidad de gente gratuitamente, pero hubo conflictos entre los representantes, lo que derivó en la suspensión de las luces y el sonido y por ende la cancelación del concierto. Esto empeoró el ánimo de Lavoe, quien al regresar al Hotel Regency y tras una discusión con su esposa, hizo un intento de suicidio lanzándose desde el noveno piso. Sufrió muchos daños en todo el cuerpo: la fractura de ambas piernas (la izquierda sufrió más daños), la fractura del brazo derecho y de algunas costillas, lo que obligó a quienes lo intervinieron a implantarle platinas de titanio en ambas piernas, en el brazo derecho y en las costillas. Todos podriamos llegar a pensar, como fue que con tan terrible accidente no quedo cuadraplegico y conectado a un respirador, la respuesta es unica y exclusivamente, pura y física suerte y porque su muerte no le correspondía llegar todavía, o quizás el llego tarde a su propia cita con la muerte, así era Héctor Lavoe. Lo lamentable de todo esto, es que en realidad Héctor si iba a recuperarse de tan terrible condición convaleciente, pero necesitaba mucho reposo, pero debido a que su situación economica no era la mejor por años malgastados en vicios, lo llevaron a cumplir con los contratos y presentarse para poder manterse, y fue ahí cuando llego el terrible problema, los empresarios inescrupulosos al igual que sus representantes, vieron en esta situación una posibilidad de reunir muchísimo más dinero ya que todos querían saber que pasaba con Hector después del accidente, si estaba vivo, si era el mismo, si todavía cantaba, etc. Por eso lo sometieron a realizar mas presentaciones de las que el podía soportar y para colmo de todo, comenzaron a reducirle la paga en dinero y a aumentarsela en cocaina y/o en heroina, esto provoco el aceleramiento del deterioro a causa del SIDA en su cuerpo, y obviamente a ir frenando poco a poco su recuperación, ya que se presume que Hector para esa época no solo padecia SIDA, sino también diabetes, lo cual le impedía que la herida de su pierna izquierda (que fue la más dañada) sanara con prontitud. Todo ese abuso al que fue sometido durante 1989 y 1990 lo llevaron a un colapso total, el cual se manifestó en un derrame que le quito facultades motrices en medio rostro, impidiéndole hablar bien y menos cantar. Al verse en esta situación las sanguijuelas que lo rodeaban decidieron abandonarlos porque ya no veían de que modo poder seguir atrayendo a la gente a ver a un Hector que a duras penas se le entendía lo que decía y que cada vez era mas irreconocible físicamente. Es entonces cuando Hector desaparece de la vida pública y deabula por las calles haciendo parte del paisaje detetiorado y decadente del "Lower East Side" de Manhattan y demás barrios peligrosos de Nueva York, y cuando no era en las calles era en su igual de decadente apartamento, sumido en la degradación total. La última vez que se vio a Héctor con la Fania fue en 1991, en un fallido intento de revivirlo musicalmente, que más bien se vio como un circo cruel y despiadado contra lo que le quedaba de vida, no pudo siquiera entornar las primeras partes de "mi gente". Ya para 1992, afortunadamente un joven llamado Jorge Perez, lo rescató y se lo llevó a la Florida, para que ahí viviera con el y su madre y fuera internado a rehabilitación. Al principio Hector no quería, solo deseaba seguir hundiéndose, pero al final acepto ir, con el pasar de los meses, Hector recupero peso y salud, y también el animo. El estaba convencido de que volvería a cantar pero ya era algo imposible para el, su falta motricidad facial se lo impedía, mas sin embargo el vivía con esa ilusion y eso lo mantenía animado. Pero lamentablemente un personaje llamado David Lugo fue en busca de Hector, con el pretexto de que en Nueva York, había una fundación dispuesta a atenderlo, todo era una gran mentira, ya que su objetivo era seguir explotandolo, ya que la gente aun querían verlo, el seguia siendo el idolo de muchos. Y se lo llevó de regreso a Nueva York donde paso sus últimos años presentadonde frente a la gente que tristemente lo veían deteriorarse en la tarima, y que poco a poco se fue apagando mas, hasta que el 29 de junio de 1993 falleció a causa de un paro al corazón. Héctor Lavoe murió cinco años después, el 29 de junio de 1993, en el Memorial Hospital de Queens. Fue enterrado en el cementerio Saint Raymond del Bronx (Nueva York); y nueve años después sus restos fueron llevados a su ciudad natal, Ponce (Puerto Rico), tal como él mismo pidió. La gestión fue realizada por otro famoso cantante de salsa, Ismael Miranda. Características de su voz[editar · editar fuente]Las características de la voz de Lavoe eran su nasalidad natural, que no fingía al cantar. Otro aspecto era el brillo en su voz y lo limpia que era: no sonaba rasposa ni opaca. Sumado a eso, poseía una gran fuerza para cantar, que le imprimía un carácter fuerte a sus interpretaciones. Tenía también un manejo bastante eficiente de su registro vocal, el cual se extendía desde el la2 (como se aprecia en algunas versiones en vivo de «La Murga de Panamá», mientras hacía la melodía de los trombones), hasta el la4 (que se puede apreciar en el bolero «Tanto como ayer» y «La retirada»).[23] Tenía un registro de tenor común, de dos octavas, que comprende entre "la2" y "la4",con una tesitura que le facilitaba ejecutar sus agudos. También poseía una dicción que le daba la cualidad de cantar fraseos extensos y rápidos con mucha claridad y con buena emisión, lo cual le permitía al oyente entender lo que estaba cantando. Reconocimientos[editar · editar fuente]Existen monumentos levantados en su honor en Ponce (Puerto Rico) ―donde se le considera Hijo Ilustre― y en el puerto del Callao (Perú). Su agitada vida personal y profesional fue llevada al teatro en 1999 con la obra ¿Quién mató a Héctor Lavoe? producida por Pablo Cabrera y David Maldonado. La personificación de Héctor Lavoe fue realizada por el cantante de salsa Domingo Quiñones. Ocho años más tarde, en 2007, aparece la película biográfica El cantante, protagonizada por Marc Anthony y Jennifer López. Influencia[editar · editar fuente]La influencia musical de Héctor Lavoe se ve presente en muchos de los cantantes de salsa contemporáneos, que sienten una gran admiración por lo que fue Lavoe para el mundo de la salsa. Dado al enorme reconocimiento que tiene, estos nuevos cantantes del género tratan de imitarlo tanto en su voz como en su personalidad. Pero esta influencia no sólo se limita al género de la salsa; si se hace un análisis detallado de lo que era la personalidad de Lavoe, su forma de expresarse y las letras de sus canciones, podremos apreciar que en el género del reggaetón, esta muy presente su influencia, aunque esta relación desata muy frecuentemente el disgusto de los fanáticos de la salsa, quienes en su mayoría tienen una perspectiva del reggaetón, como un género musical muy pobre y de caracter ofensivo y vulgar, en especial cuando se tratan temas sobre el sexo femenino, sin embargo es imposible negar la influencia de Lavoe, en estos exponentes de dicha música y se podría incluso llegar a la afirmación de que el género del reggaetón nació de la influencia y admiración que dejo Lavoe plasmado en los nuevos jóvenes que deseaban abrirse paso en el mundo de la musica, quienes la mayoría son puertorriqueños y en sus canciones hacen alusión a sus canciones, cantándolas igual o modificando fragmentos de éstas. De igual manera pasa en su forma de expresarse; algunos de los dichos o palabras que usaba con frecuencia hacen parte ahora de la jerga boricua. Discografía[editar · editar fuente]Artículo principal: Anexo: Discografía de Héctor Lavoe. Con la orquesta New Yorker[editar · editar fuente]Serie Título Año de producción «Joan Pimentel» (canción). 1965 Con la orquesta de Willie Colón[editar · editar fuente]Serie Título Año de producción F 337 El malo 1967 F 347 The hustler 1968 F 370 Guisando 1969 F 384 Cosa nuestra 1970 F 394 La gran fuga 1971 F 399 Asalto navideño (vol. 1) 1971 F 406 Crime pays 1972 F 424 El juicio 1972 F 444 Lo mato 1973 F 449 Asalto navideño (vol. 2) 1973 F 484 The good, the bad & the ugly 1975 F 610 Vigilante 1983 Con su orquesta[editar · editar fuente]Serie Título Año de producción F 461 La voz 1975 F 492 De ti depende 1976 F 522 Comedia 1978 F 545 Recordando a Felipe Pirela 1979 F 555 Feliz Navidad 1979 F 558 El sabio 1980 F 598 Qué sentimiento 1981 F 634 Reventó 1985 F 647 Strikes back 1987 Con Fania All Stars[editar · editar fuente]Serie Título Año de producción Live at The Red Gater (Vol. I) 1968 Live at The Red Gater (Vol. II) 1969 Live at The Cheetah (Vol. I) 1972 Live at The Cheetah (Vol. II) 1972 Live at Yankee Stadium (Vol. I) 1973 Live at Yankee Stadium (Vol. II) 1973 Live at Coliseo Roberto Clemente 1974 Live in Africa 1974 Latin - Soul - Rock 1974 Tributo a Tito Rodríguez 1976 Live in Japan 1976 Habana Jam 1979 The commitment 1980 Latin connection 1981 Live in Varadero 1981 Lo que pide la gente 1984 Viva la charanga 1986 Bamboleo 1988

EL GRAN COMBO DE PUERTO RICO

El Gran Combo de Puerto Rico, comúnmente conocido como El Gran Combo, es una agrupación musical de salsa de Puerto Rico. Es considerado el grupo más exitoso de esa nación y uno de los grupos de salsa más conocidos en toda América Latina. Muchos de los cantantes legendarios de la salsa han sido miembros en algún momento de la orquesta, por ello se le ha asignado el nombre de La Universidad de la Salsa, apodo que les dio el periodista colombiano Ley Martin. El Gran Combo fue fundado por Rafael Ithier en mayo de 1962. Ithier sigue siendo todavía el pianista de la orquesta y su director musical. El grupo es conocido por temas como "Falsaria", "Un verano en Nueva York", "Eliminación de Feos", "Gotas de lluvia", "La muerte", "Azuquita pa´ el café", "La fiesta de pilito", "No hay cama pa´tanta gente", "Me liberé", entre otras. El grupo se encuentra promoviendo su álbum más reciente Sin Salsa No Hay Paraíso en giras que los llevan alrededor del mundo. Índice [ocultar] 1 Historia 1.1 Nacimiento 1.2 Primeros álbumes 1.3 Años 1970 1.4 Años 1980 y 1990 1.5 El nuevo milenio 2 Discografía 3 Compilaciones 4 Miembros Actuales 4.1 Cantantes 4.2 Orquesta 5 Antiguos miembros 5.1 Cantantes 5.2 Percusionistas 5.3 Bajo 5.4 Trompetistas 5.5 Trombonistas 5.6 Saxofonistas 5.7 Otros 6 Enlaces externos Historia[editar · editar fuente]Nacimiento[editar · editar fuente]El grupo nació como resultado de la ruptura de Rafael Cortijo y su Combo en 1962, agrupación de la que era parte Rafael Ithier. Para ese entonces algunos miembros del ya desintegrado grupo se reunieron para la grabación de una placa discográfica junto con el cantante dominicano Joseíto Mateo en uno de sus álbumes de su compañía disquera Gema Records, resultando en el lanzamiento de Meneame los Mangos. El grupo fue llamado El Gran Combo por el empresario Guillermo Álvarez guedes, quien fuera el arreglista musical en la producción del disco. Los miembros iniciales eran Rafael Ithier, Eddie Pérez, Héctor Santos, Rogelio "Kito" Vélez, Víctor Pérez, Martín Quiñones, Miguel Cruz, Milton Correa y Roberto Roena. El grupo se encontró nuevamente para definir los fundamentos de la orquesta y escogieron a los cantantes: Daniel Vázquez, Pellín Rodríguez y Chiqui García. En 21 de mayo de 1962, El Gran Combo se escuchó por primera vez en la radio puertorriqueña. Más tarde, se convirtieron en los músicos del estudio para el programa de televisión "La Taberna India", producido por Cerveza India. Luego de su debut en vivo en Hotel La Concha en San Juan, Puerto Rico, Chiqui García abandonó la orquesta. Sammy Ayala, quien había tocado con Ithier en la orquesta Cortijo, recomendó el reclutamiento de Junior Montañez. Al poco tiempo, éste cambió su nombre por Andy. Primeros álbumes[editar · editar fuente]En 20 de noviembre de 1963, El Gran Combo lanzó su primer álbum como grupo, El Gran Combo ... De Siempre, para Gema Records, con Rodríguez y Montañez como las voces líderes. El lanzamiento fue dos días antes del asesinato del presidente de los Estados Unidos, John F. Kennedy. Después de ese terrible homicidio, la distribución del álbum en Puerto Rico fue pospuesto. Fue entonces que se comenzó a distribuir inicialmente en México, Panamá y Venezuela en donde el disco fue muy bien recibido y muy bien difundido radicalmente. Fue distribuido, posteriormente, en Nueva York y después en Puerto Rico, en donde se convirtió en una exitosa producción reconocida por un Disco de Oro. La agrupación obtuvo gran éxito con presentaciones musicales en varios salones de baile de la ciudad de Nueva York, un año después del lanzamiento de su primer álbum. Estos salones incluían al Palladium Ballroom, el Centro de Manhattan y El Caborrojeño. El éxito que obtuvieron en dichos centros públicos, les abrió el camino para otras apariciones musicales similares en otros países, incluyendo a República Dominicana, Panamá, Colombia y Venezuela. A través de Latinoamérica la placa permanecía en primer lugar consistentemente en las listas musicales. Para ese entonces su popularidad les hizo acreedores de un contrato en televisión exclusivo en "El Show de las 12" en Puerto Rico. La creciente popularidad del show de televisión también hizo aumentar la demanda por la orquesta en toda clase de bailes y eventos musicales y a su vez aumentó las ventas del álbum. En 1964, el músico Elías López se unió a la orquesta. Sin embargo, el exceso de exposición hizo que sus demandas se fueran en declive. Aún, en 1967, su álbum Boogaloo con el Gran Combo también llegó al estatus de disco de oro. En 1969, Roberto Roena y Elías López abandonaron la orquesta para formar el Apollo Sound juntos, siendo sustituidos por Baby Serrano y Edwin Cortés. Héctor Santos' y Víctor Pérez también abandonaron el grupo y fueron sustituidos por José Duchesne y Mike Torres, quién fue a su vez sustituido por Gerardo Cruz, quién permaneció en la orquesta diez años. A pesar de estos cambios, siguió prosperando la agrupación y hasta ganó el premio Agüeybaná de Oro en Puerto Rico, como la mejor orquesta de 1969. Años 1970[editar · editar fuente]La década siguiente empezó con más cambios con la sustitución de Milton Correa por Miguel Marrero. Entonces, Mike Ramos fue incorparado al grupo como coreógrafo y corista y Mike Torres fue sustituido subsecuentemente por "Taty" Maldonado. Una vez más, la orquesta salió adelante ganando más premios. La fama de la orquesta creció internacionalmente. Problemas con la disquera Gema Records, forzó al grupo por un momento a producir sus álbumes independientemente, obligando a uno de los miembros del grupo (Andy Montañez)hipotecar su vivienda para cubrir los gastos de las producciones de sus discos. Esto resultó en el establecimiento de su propio sello discográfico, EGC Records y su primera producción, una placa titulada "Estamos Primeros". En 1971, el trombón, tocado por Fanny Ceballos fue introducido a la orquesta. Ceballos permaneció en la orquesta hasta su muerte por cáncer en 1991. El primer álbum con ese sonido fue "De Punta a Punta" que incluyó temas musicales clásicos tales como "Don Goyo", "Achilipú" y "Le dicen Papá". El disco ganó el premio al mejor disco en el Festival de discos de Oro de Miami. En 1973 Pellín Rodríguez dejó el grupo para lanzarse como solista y fue entonces sustituido por Marcos Montañez, hermano de Andy Montañez, quien trabajó con la orquesta por sólo seis meses, así mismo fue suplantado por el virtuoso sonero Charlie Aponte. En 1973, El Gran Combo cantó en frente de 50,000 fanáticos en el famoso Estadio Yanqui en ciudad de Nueva York como la actuación que abrió el espectáculo del concierto vendido a capacidad de Fania All Stars. En 1975 Miguel Cruz, uno de los miembros fundadores de la orquesta abandonó el grupo debido problemas médicos y fue sustituido por Fernando Pérez. El año siguiente, la orquesta ganó el Premio Nueva Orleans y también el premio de la Copa del Presidente otorgado en Venezuela por ser la mejor orquesta musical internacional en 1977. Pero ese año también vio la jubilación de Martín Quiñones y la también salida de Andy Montañez, quien se fue del grupo tras recibir un buen contrato para reemplazar a Oscar D'León en la orquesta Dimensión Latina. Jerry Rivas fue escogido para unirse a la orquesta. Ambos Rivas y Aponte todavía son miembros de la orquesta. El éxito de este nuevo dúo fue probado con International lanzado en 1977 y En Las Vegas en 1978 que alcanzó el estatus de disco de oro. El lanzamiento del larga duración "El Gran Combo en Las Vegas" en 1978 alivió el miedo de muchos, quienes se preocuparon con los constantes cambios de personal que se producían entonces. Para finales de la década de 1970 la orquesta había ganado más honores, un ejemplo de esto es el reconocimiento que les fue otorgado en el Festival de bomba y plena del Instituto de Cultura Puertorriqueña. La década de los 1970 cerró con el lanzamiento de otro disco de oro llamado "Aquí no se sienta Nadie" en 1979 y una gira exitosa en Perú. El próximo año los vio obtener reconocimiento y validéz en el difícil mercado de México con el premio Calendario de Plata. Años 1980 y 1990[editar · editar fuente]La orquesta abrió los 1980 con el larga duración Unity. Continuaron recibiendo numerosos premios en toda América Latina. En 1982 celebraron su aniversario número 20 en el Madison Square Garden. También alcanzaron a Europa ese año tocando en París, Francia. En la década de 1980 también se destacaron por el congo de oro del carnaval de Barranquilla. En 1984 viajaron a Alaska donde recibieron una gran bienvenida. Luego, lanzaron el álbum titulado Breaking the Ice ("Rompiendo EL Hielo") que les mereció su primera nominación al Grammy. A principios de los años 1990 fueron homenajeados en la ciudad de Madrid, España, abriendo la década con el pie derecho. En 29 de marzo de 1992 celebraron un concierto masivo en el Estadio Hiram Bithorn ante 30,000 personas. El nuevo milenio[editar · editar fuente]En 2002, El Gran Combo celebró su aniversario número 40 con dos conciertos vendidos a capacidad en el Coliseo Rubén Rodríguez en Bayamón, Puerto Rico. Esta celebración generó un álbum renombrado que fue reconocido como uno de los mejores de ese año. Un año después recibieron una nominación al Grammy por Mejor Álbum Tropical. Desde el 2006 la orquesta ha lanzado sobre 40 álbumes o CD y ha recibido numerosos premios, incluyendo discos de oro, un "Calendario de Plata" en México, un "Combo Dorado" en Colombia, un "Premio Paoli" en su patria, Puerto Rico y una distinción honorable en España y muchos otros. En ese año lanzaron la producción discográfica titulada Arroz con Habichuela, del cual salieron varios éxitos como "No Hay Manera", "Como Tiembla El Alma", "Piénsalo" y "Arroz Con Habichuela". En el 2010 lanzaron su más reciente producción discográfica titulada Si No Hay Salsa No Hay Paraíso, del cual salió el éxito "Sin Salsa No Hay Paraíso", entre otros. En agosto del 2011 El Gran Combo re-escribió la letra de su propio éxito "No Hago Más Ná" que cantaba en sátira acerca de un día en la vida de un vago. La versión nueva la llamaron "Echar Pa'lante" y cantaba sobre un día en la vida de un trabajador y las virtudes del trabajo. Además lanzaron un video con un mensaje positivo antes de comenzar la canción y enseñaron tomas de gente trabajando en comparación con miembros del Gran Combo tocando diferentes instrumentos. El Gran Combo celebró sus 50 años el 11 de noviembre de 2012. Discografía[editar · editar fuente]Serie Título Año de Producción Sello LPG 1170 Menéame los Mangos 1962 Gema Records LPG 1181 De Siempre 1963 Gema Records LPG 1188 Acángana 1964 Gema Records LPG 1195 Ojos Chinos: Jala Jala 1964 Gema Records LPG 3001 El Caballo Pelotero 1965 Gema Records LPG 3021 En Navidad 1965 Gema Records LPG 3011 El Swing del Gran Combo 1966 Gema Records LPG 3027 Maldito Callo 1967 Gema Records LPG 3030 Esos Ojitos Negros 1967 Gema Records LPG 3035 Fiesta Con el Gran Combo 1967 Gema Records LPG 3044 Boogaloos Con el Gran Combo 1967 Gema Records LPG 3052 ¿Tu Querías Boogaloo?, ¡Toma Boogaloo! 1967 Gema Records LPG 3057 Pata Pata, Jala Jala y Boogaloo 1968 Gema Records LPG 3061 Tangos Por el Gran Combo 1968 Gema Records LPG 3066 Los Nenes Sicodélicos 1968 Gema Records LPG 3074 Latin Power 1968 Gema Records LPG 3078 Smile It's 1968 Gema Records LPG 3083 Este Si Que Es 1969 Gema Records RCSLP 1911 Estamos Primeros 1970 EGC Records RCSLP 1912 De Punta a Punta 1971 EGC Records RCSLP 1913 Por el Libro 1972 EGC Records RCSLP 1914 En Acción 1973 EGC Records RCSLP 1915 5 1973 EGC Records RCSLP 1916 Disfrútelo Hasta el Cabo! 1974 EGC Records RCSLP 1921 7 1975 EGC Records RCSLP 1922 Los Sorullos 1975 EGC Records RCSLP 1923 Mejor Que Nunca 1976 EGC Records RCSLP 1924 Internacional 1977 EGC Records RCSLP 1925 En Las Vegas 1978 Combo Records RCSLP 2013 ¡Aquí No Se Sienta Nadie! 1979 Combo Records RCSLP 2018 Unity 1980 Combo Records RCSLP 2021 Happy Days 1981 Combo Records RCSLP 2026 Nuestro Aniversario 1982 Combo Records RSCLP 2034 La Universidad de la Salsa 1983 Combo Records RSCLP 2039 In Alaska: Breaking The Ice 1984 Combo Records RSCLP 2043 Innovations 1985 Combo Records RSCLP 2045 Nuestra Música 1985 Combo Records RSCLP 2048 Y Su Pueblo 1986 Combo Records RSCLP 2054 Romántico y Sabroso 1988 Combo Records RSCLP 2060 Ámame 1989 Combo Records RSCLP 2070 Latin Up! 1990 Combo Records RSCLP 2080 ¡Erupción! 1991 Combo Records RSCLP 2090 ¡Gracias!: 30 Años de Sabor 1992 Combo Records RSCLP 2095 First Class International 1993 Combo Records COM 2104 Puerto Rico: La Ruta del Sabor 1994 Combo Records COM 2111 Juntos de Nuevo Con Andy Montañez 1995 Combo Records UMD 42004 Para Todos los Gustos 1995 Fonovisa Inc UMD 42007 Por Todo lo Alto 1996 Combo Records COM 2130 Pasaporte Musical 1998 Combo Records COM 2134 Nuevo Milenio: El Mismo Sabor 2001 Combo Records SNY 9322 40 Aniversario en Vivo! 2002 RCA Records SNY 95481 Aquí Estamos y... ¡De Verdad! 2004 Sony International SNY 702756 Arroz Con Habichuela 2006 Sony International SNY 8869 Sin Salsa No Hay Paraíso 2010 Sony Music Latin Compilaciones[editar · editar fuente]Serie Título Año de Producción LPG SE-COL-031 15 Grandes Éxitos Vol. 1 1966 DH 1509 15 Grandes Éxitos Vol. 2 1967 LPG 3036 Boleros Románticos 1967 LPG 1510 15 Grandes Éxitos Vol. 3 1968 LPG SE-COL-026 Merengues 1968 LPG SE-COL-027 Guarachas 1968 LPG SE-COL-028 Bombas, Bombas, Bombas 1968 LPG SE-COL-029 Épocas de Oro 1968 LPGS-5057 Los Años de Andy Montañez Con el Gran Combo 1978 COM 2029 20 Años, 20 Éxitos 1982 COM 2150 25th Anniversary 1987 D 16040 20 Grandes Éxitos 1990 UR 057 Celebrando los 30 Años y Sus Éxitos de Siempre 1992 COM 2091 30 Aniversario Bailando con el Mundo 1992 SNY 81476 The Best 1995 COM 2111 Juntos de Nuevo 1995 D 16476 16 Boleros 1996 COM 2125 35th Anniversary: 35 Years Around The World 1997 FTS 20007 30 Éxitos Remasterizados 2000 DH 5001 Los 40 del Gran Combo 2002 RSC 02140 Salsa Classics Revisited 2003 COM 2145 From The Beginning: 45 Years of Music 2007 E 20386 46 Aniversario: Toda Una Historia 2008 COM 2141 It's Christmas Time!: 15 Greatest Hits 2010 BPEGC 371035 Salsa: Un Homenaje a El Gran Combo 2010 Greatest Christmas Hits of the Last Half Century: 50 Años de Patria, Tradición y Navidad 2012 Miembros Actuales[editar · editar fuente]Cantantes[editar · editar fuente]Charlie Aponte (1973 - presente) Jerry Rivas (1977 - presente) Luis "Papo" Rosario (1980 - presente) Orquesta[editar · editar fuente]Rafael Ithier - líder, director, piano (1962 - presente) Eddie Pérez - saxofón (1962 - 2013, a causa de su muerte) Freddie Miranda - saxofón (1980 - presente) Luis "Taty" Maldonado - trompeta (1970 - presente) Víctor "Cano" Rodríguez - trompeta(1980 - present) Moisés Nogueras - trombón (1991 - presente) Freddy Rivera - bass (1989 - presente) Domingo "Cuqui" Santos - timbales (1988 - presente) Miguel "Pollo" Torres - conga (1979 - presente) Richie Bastar - bongo (2001 - presente) Jorge Torres - Ingeniero de sonido Willie Sotelo - piano (2006 - presente) Miguel Ángel Garzón - maracas (1989 - No presente) Antiguos miembros[editar · editar fuente]Cantantes[editar · editar fuente]Pellín Rodríguez (1962 - 1973) Marcos Montañez (1973) "Chiqui" Rivera (1962) Andy Montañez (1963 - 1976) Joseíto Mateo {[1962-1963}] Percusionistas[editar · editar fuente]Roberto Roena - Bongó (1963 - 1969) Milton Correa - timbales (1962 - 1970) Miguel Malaret - timbales (1970 - 1979) Edgardo Morales - timbales (1979 - 1988) Martín Quiñones - conga (1962 - 1977) Martín Quiñones, Jr. - conga (1977 - 1978) Luis Díaz - conga (1977) Gabrel "Baby" Serrano - Bongó (1969 - 1984) José Miguel "Mitchel" Laboy - Bongós (1984 - 2001) Richie Bastar {{2001-???? Bongó Daniel Vázquez (1962 - 1963 )Bongos Bajo[editar · editar fuente]Miguel Cruz - (1962 - 1975) Fernando Pérez - (1975 - 1989) Trompetistas[editar · editar fuente]Mike Torres (1969) Gerardo "Grillo" Cruz (1969 - 1979) Nelson Feliciano (1979 - 1980) Rogelio "Kito" Vélez (1962 - 1964) Elías López (1964 - 1969) Trombonistas[editar · editar fuente]Epifanio "Fanny" Ceballos - trombón (1971 - 1991) Toñito Vázquez - trombón (1991) Saxofonistas[editar · editar fuente]Héctor Santos (1962 - 1969) José Duchesne (1969 - 1980) Eddie Pérez 1962 - 2013 Otros[editar · editar fuente]Daniel Vázquez (1962 - ????) Joseíto Mateo (1962) Mickey Duchesne (1962 - ????) Edwin Cortés (1969) Tommy Sánchez (1969 - ????) Mike Ramos (1970 - 1979) Edwin González (1979) Enlaces externos[editar · editar fuente]Sitio oficial Biografía de "El Gran Combo" Historia del Gran Combo Video de la canción "Echar Pa'lante" re-escrita de la versión original de "No Hago Más Ná" "Combo Records" Obtenido de «http://es.wikipedia.org/w/index.php?title=El_Gran_Combo_de_Puerto_Rico&oldid=69463533» Categorías: Grupos de música salsaGrupos de música de Puerto Rico